Título: El orden alfabético
Autor: Juan José Millás
Tapa blanda, 293 páginas
Punto de Lectura, 1998
Argumento
Un mundo regido por el orden alfabético: éste es el universo imaginario en el que se refugia el protagonista de esta novela, una fantasía infantil que le protege de la realidad adulta, marcada por la soledad y por un padre enfermo.
En esta magistral novela, Juan José Millás desmonta los límites de la realidad, da la vuelta al calcetín y crea mundos diferentes, realmente fantásticos, comunicados por puentes de imaginación desbordante, y consigue cambiar el modo en que observamos lo que nos rodea.
Reseña
Este libro fue el elegido para el club de lectura del mes de marzo y tengo que confesar ya sabéis que no me callo casi nada que no había leído nada de este autor. Sí que es verdad que le he oído hablar alguna vez o he leído hace tiempo algún artículo suyo, pero sin más.
No sé por qué me hice una idea equivocada de lo que me iba a encontrar y es que al leer que había un mundo imaginario, me esperaba una de dos o encontrarme con un libro más de fantasía o que tirase más por derroteros al estilo de Shutter Island o Los renglones torcidos de Dios. Sin embargo, no fue así.
El libro se divide en dos partes: una, la que nos narra los delirios que vive un niño de 14 años al caer enfermo y la cual nos es narrada en 1ª persona (Esta parte me resultó muy entretenida y menos pesada que la segunda) y, la segunda, donde conocemos a Julio (ese niño ya hecho hombre) y lo seguimos en 3ª persona por su vida, sus recuerdos y su viaje por la vuelta del calcetín.
Me ha gustado mucho el mundo del revés del calcetín donde las palabras "son nuestra más inagotable fuente de magia, capaces de infringir daño y de remediarlo", como diría Dumbledore. Y es que la historia nos muestra claramente que sin el poder de la letra escrita, la civilización no habría conseguido todos los triunfos logrados hasta ahora. No seríamos más que simples animales.
He disfrutado mucho con cada aventura que el niño tenía que enfrentar, por muy absurda que esta pudiera parecer. Todo en nombre del amor. La belleza de las palabras cuando nos cuenta cómo los libros cobran vida propia y todo lo que acontece a raíz de esto (viviendo algo similar a Fahrenheit 451) me ha parecido precioso.
Aparte de esta moraleja, tenemos la historia de nuestro protagonista que siente que lo único que le vincula a su padre son las palabras. Se siente solo, perdido y no duda en mentir o viajar por el mundo al revés para encontrar un vínculo ya sea con personas vivas o muertas.
El final del libro para mí no tenía mucho sentido y se veía como si le faltara una parte hasta que debatiendo y contrastando ideas en la reunión, hemos llegado a la conclusión de que a través del diccionario y la palabra con la que se topa, tiene una segunda oportunidad para volver a empezar.
En resumen, es un libro que no ha conseguido enamorarme más que en la primera parte, por lo que no os lo puedo recomendar a pies juntillas, pero sí os digo que no me importaría darle otra oportunidad al autor.